Rashtriya Janata Dal tiene su sede en Bihar, el mando dentro de su propia coalición

Tamil Nadu, la fuerza del Partido Democrático de los 186 que tenía el PBJ en la legislatura

Popular proviene de Cachemira y los anterior. Muy probablemente esta situación

miembros del Partido Comunista de la Indiahaga que el nuevo gobierno quede sujeto a

Marxista tienen su base electoral en Bengala Occidental y en Kerala. La relativa debilidad El 13 de mayo, con una victoria sorpresiva, el Partido del Congreso ganó más escaños que cualquier otro partido en la Cámara Baja de la India. Contra lo esperado, este partido superó a la coalición que encabezaba el Primer Ministro Vajpayee, del partido nacionalista Bharatiya Janata (PBJ). Sin embargo, al no haber alcanzado la mayoría por sí mismo se vio obligado a formar, por primera vez en su historia, una coalición en Delhi y a nombrar Primer Ministro a Manmohan Singh en lugar de Sonia Gandhi, lideresa del Partido del Congreso. Esta coalición sólo tiene 215 curules, 58 menos de las necesarias para alcanzar la mayoría en el Lok Sabha. Actualmente, la coalición opositora encabezada por el PBJ cuenta con 187 escaños. Para conservar el poder, el Partido del Congreso requiere del apoyo legislativo de dos partidos comunistas que no forman parte de la coalición gobernante.

Los resultados de las elecciones fueron inesperados. La sorpresa para el Partido del Congreso fue tal que le tomó más de una semana nombrar un gobierno. Los resultados de este proceso son únicos en más de un sentido. Es la primera vez que el Partido del Congreso se presenta a una elección general con una alianza previa. Además, los partidos de izquierda alcanzaron su mayor éxito histórico pues obtuvieron cerca de 60 escaños en el parlamento, lo que efectivamente les da una posición ventajosa para manejar la balanza del poder.

Una coalición precaria

los caprichos de sus aliados, como el partido con base en Bihar que tiene 21 escaños o el partido de Tamil Nadu, que tiene 16. Estos dos partidos ya han alzado la voz por la asignación de carteras del gabinete. Mientras tanto, dos partidos comunistas –el Partido Comunista de la India-Marxista, (PCI-M) que cuenta con 43 curules y el Partido Comunista de la India (PCI), con 10 escaños– decidieron no formar parte de la coalición, lo que de hecho significa que pueden ejercer el poder sin asumir responsabilidades, medida potencialmente desestabilizadora. Por el momento, todos los partidos que apoyan a la coalición en el poder están unidos por su oposición a la coalición que encabeza el PBJ, tanto en el centro como en los estados.

Rupak Chattopadhyay es gerente de programas del Foro de Federaciones.

La composición del nuevo gobierno lo vuelve representante de los intereses de los estados, aunque el federalismo no forme parte explícita de la agenda de trabajo del nuevo gobierno. El ascenso de Manmohan Singh al puesto de Primer Ministro reafirma la trayectoria secular de la India. Es la primera ocasión que en este país tanto el Jefe de Estado (el Presidente Kalam, que es musulmán) como el Jefe de Gobierno (el Premier Ministro Singh, que es Sij) pertenecen a comunidades minoritarias.

Los partidos de las regiones comparten el poder

Todos los partidos que apoyan al nuevo gobierno son regionales. Por ejemplo, el

del Partido del Congreso al interior de la

coalición garantiza que los temas regionales y las relaciones entre el centro y los estados ocuparán un lugar importante en todas las esferas de las políticas públicas.

Desde 1996, los partidos regionales han jugado un papel importante en la política nacional. El Partido Telegu Desam, que hasta este año gobernaba en Andhra Pradesh, utilizaba la posición de influencia que tenía por ser el mayor aliado del gobierno de coalición de Vajpayee para asegurar un apoyo a gran escala para el desarrollo del estado. En asuntos similares, el nuevo Gobierno de la India, encabezado por el Partido del Congreso, podría ser un reflejo exacto de la administración anterior. En su primera conferencia de prensa, el Primer Ministro Singh puso énfasis en la importancia de mantener buenas relaciones entre el centro y los estados.

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Federaciones Vol. 4 No. 2, Julio de 2004

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El Partido del Congreso enfrenta demandas de las regiones

El gobierno entrante también tendrá que enfrentar una serie de nuevos retos en temas relacionados con el federalismo:

Los estados gobernados por aliados ejercen presiones clientelistas: Los fondos para el desarrollo que la Comisión de Planeación canaliza (véase recuadro), con frecuencia han sido asignados bajo un criterio de clientelismo político y no por criterios objetivos. Con un nuevo gobierno central, los estados gobernados por el Partido del Congreso y sus aliados tienen mayores posibilidades de obtener financiamiento que aquellos gobernados por la coalición saliente. Laloo Prasad Yadav, del Rashtriya Janata Dal, un aliado clave para el gobierno entrante, ya hizo pública su intención de obtener mayores apoyos financieros para Bihar.

La disolución de gobiernos estatales: La Constitución de la India otorga al gobierno central la facultad de destituir cualquier gobierno estatal (en teoría, una falla en el sistema constitucional del Estado). Esta posibilidad se incluyó para hacer frente a situaciones de emergencia pero generalmente ha sido el pretexto para disolver gobiernos estatales en manos de opositores políticos. El Dravida Munnetra Kazhagam y sus aliados ya están ejerciendo presión sobre el nuevo gobierno –encabezado por el Partido del Congreso– para que les ayude a saldar cuentas con sus opositores en Tamil Nadu, destituyendo al gobierno estatal. Partidos de la oposición en Gujarat podrían

gobierno central para que

disuelva el gobierno del

señor Modi del PBJ en ese

estado. En este caso en

particular, el motivo de la

destitución sería su

incapacidad para evitar

disturbios en las

comunidades del estado

durante 2002.

Disolver un gobierno estatal puede no resultar sencillo pues se requiere de la aprobación de ambas cámaras parlamentarias. Aunque el gobierno entrante tiene una mayoría en la Lok Sabha, las alianzas opositoras están equilibradas en la Cámara Alta del Parlamento (Rajya Sabha). El 21 de junio habrá elecciones en 14 estados de la India para ocupar las 60 curules de esa Cámara que quedaron libres después de que varios miembros se retiraran. Si tomamos en cuenta las arrasadoras victorias del PBJ en tres procesos estatales en noviembre del año pasado y la mejoría en su posición en la recién electa legislatura estatal de Karnataka, es previsible que el PBJ y sus aliados alcancen la mayoría en la Rajya Sabha. Esta composición seguramente limitará los esfuerzos para destituir cualquier gobierno estatal, pero no cabe duda de que los aliados del Partido del Congreso seguirán ejerciendo presión.

Presiones para crear un nuevo estado: Las elecciones estatales en Andhra Pradesh coincidieron con las nacionales para la Lok Sabha. Un partido aliado con el Partido del Congreso en las elecciones de Andhra Pradesh demandó crear –dentro del territorio de Andhra Pradesh– el nuevo estado de Telengana. Este partido de reciente creación, el Telengana Rashtriya Samiti, representa los intereses de una región pobre y económicamente

Distinguir dos Comisiones

(tomado de Federaciones, edición especial triple, agosto de 2002)

La Comisión de Finanzas de la India está compuesta por cinco miembros, la mayoría, expertos en finanzas y economía. El Presidente nombra a la Comisión cada cinco años.

La Constitución confiere autoridad a la Comisión. Esta autoridad no proviene de los gobiernos en turno, ya sean del centro de la federación o de los estados que la componen. Su mandato primordial es distribuir los ingresos provenientes de una serie de impuestos federales constitucionales específicos y de los impuestos de consumo entre los gobiernos de ambos órdenes y también entre los estados. Asimismo, determina el apoyo adicional que debe ser dirigido hacia los estados con menores recursos para impulsar su crecimiento, naturalmente con cierto costo para los más desarrollados.

En ocasiones, la cantidad total por transferencias a los estados que maneja la Comisión de Finanzas es menor a las transferencias que maneja la Comisión de Planeación, órgano gubernamental que fue establecido por resolución parlamentaria en 1950 y que preside el Primer Ministro.

Ambas Comisiones utilizan sólo recursos del gobierno federal para las transferencias a los estados. La Constitución obliga al gobierno federal a compartir los ingresos que ciertos impuestos generan según una fórmula fija que la misma Constitución especifica y a distribuirlos según las recomendaciones de la Comisión de Finanzas. Sin embargo, la suma adicional que el gobierno federal otorga a los estados es discrecional, se canaliza a través de la Comisión de Planeación, y depende de la evaluación que el gobierno central haga del “Plan de los 5 años” de cada estado.

La distribución de fondos adicionales entre los distintos estados corresponde también a ciertos principios, mismos que han ido evolucionando a lo largo del tiempo.

subdesarrollada del estado: Telengana. El Partido del Congreso formó una alianza previa al proceso de votación con este partido porque temía no poder vencer solo al gobierno de Andhra Pradesh.

A fin de cuentas, el Partido del Congreso obtuvo suficientes curules por sí mismo, lo que generó un cambio drástico: actualmente el Ministro Presidente del Partido del Congreso en Andhra Pradesh, Y. S. Rajshekhar Reddy, intenta desestimar las demandas del Telengana Rashtriya Samiti para crear un nuevo estado. Aunque el partido Telengana Rashtriya Samiti forma parte del gobierno de coalición, tanto en el estado como en el centro, su poder dentro de la coalición es bastante endeble. De cualquier manera, este partido ha amenazado con desencadenar una agitación pública que ejerza presión sobre el gobierno estatal y el central para que dividan el estado y se forme uno nuevo. Un movimiento de esta naturaleza podría paralizar una gran parte del noroeste de Andhra Pradesh. Al gobierno encabezado por el Partido del Congreso le preocupa liberar la región de Telengana por el riesgo de verse debilitado en el resto del estado. Sin embargo, podría llegar el momento en que los nuevos gobiernos central y estatal tengan que tomar una decisión difícil: aceptar el nuevo estado o sufrir disturbios en la región de Telengana.

Federaciones Vol. 4 No. 2, Julio de 2004